Con vientos huracanados de 140 Kilómetros por hora, árboles caídos y sin energía eléctrica, así vivió la población de la Costa Caribe de Nicaragua el paso del huracán “Julia”. Como parte del acompañamiento, esta casa de estudios superiores interculturales sirvió de albergue en cada uno de los recintos, para el resguardo de la población, así lo informó la Rectora de URACCAN, Ilenia García.

García, compartió también que, el recinto con mayores afectaciones ha sido Bluefields, con daños en la infraestructura, propiamente en las aulas de clases, pero rescata que, gracias a los esfuerzos articulados con el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), a través del Comité Nacional de Prevención, Mitigación y Atención de Desastres, se le brindó, con total prioridad, acompañamiento a la población y resguardando la vida de todos y todas.

Destacó que, en URACCAN recinto Las Minas, se albergó a 18 personas (cuatro niños, siete niñas, seis adultas y un adulto), “en el caso de los otros recintos, gracias a Dios no hubo afectaciones, pero estábamos preparados para activar albergues”, expuso la Rectora.

De igual manera, compartió a la comunidad, que siguiendo lo establecido por el Consejo Nacional de Universidades (CNU), para resguardar la vida de las y los estudiantes a nivel nacional, tras el paso “Julia”, las clases quedan suspendidas en todos los recintos universitarios, mientras que, el personal administrativos se dispondrá a verificar daños directos o indirectos que pudo causar el fenómeno en los territorios.

“Estamos en ese proceso ahorita, ayer comenzamos y en cuanto nos indiquen que ya podemos regresar a las aulas, nosotros vamos a estar listos para ellos”, concluyó.