Marena y URACCAN rescatan y liberan a reptil endémico en una hacienda de Siuna
El nombre científico del cuajipal es "caimán cocodrilus", una especie endémica de la Costa Caribe. Aquí, en el momento previo de su liberación. 
Por
José Garth Medina
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Acciones que reflejan la Misión institucional y el compromiso con la biodiversidad

Autoridades del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena), en articulación con URACCAN Las Minas y el médico veterinario Carlos Sánchez, de Siuna, liberaron a un cuajipal que fue macheteado por pobladores del barrio Pedro Joaquín Chamorro. Para salvarle la vida, al reptil se le realizaron varias operaciones y, luego de muchos cuidos, fue devuelto a su hábitat.  

El Ing. Luis Herrera Siles, en representación del recinto, informó que estas acciones forman parte de la Misión de URACCAN y de esfuerzos articulados con las autoridades que trabajan en la protección y conservación de la fauna y flora de la región.

Angélica Leonor Ruiz Calderón, Ph.D, vicerrectora de Las Minas, aseguró que se ha venido trabajando articuladamente con el Marena, acompañando los procesos que ellos están realizando en el territorio, pues parte de la filosofía de URACCAN responde a su compromiso y responsabilidad de velar por la conservación y preservación de la biodiversidad.

Enrique Urbina, propietario de la Hacienda Altamira, donde se liberó al animalito, expresó que para él es un honor albergar en su propiedad a este reptil, donde tiene ocho lagunas donde cada año nacen decenas de lagartos y cuajipales.  

El inspector departamental del Marena, ing. Norlan López, informó que el cuajipal que fue rescatado hace seis días, luego de que pobladores del barrio Pedro Joaquín Chamorro llamaran para informar que estaba el animal con heridas profundas causadas por arma blanca.

Carlos Sánchez, médico veterinario, dijo que el sábado fue llamado por el Ing. Omar Soza, del Marena, para suturar al cuajipal, aplicando ocho puntadas a nivel externo y a nivel interno de 10 a 15. También informó que aplicó antibióticos y analgésicos, y se liberó porque en cautiverio el cuajipal no quiso comer.

El médico señaló que, al ser liberado, el cuajipal no presentó ningún problema y sobrevivirá en su ambiente natural, dada su adaptabilidad y resistencia. Estos animales, exhortó el veterinario, no son agresivos y no representan ningún peligro para la población, por lo que nada justifica haberle hecho daño. Es oportuno siempre llamar a las autoridades y ser más conscientes de la importancia de esta especie en nuestros ecosistemas.

URACCAN, desde su Misión y Visión, establece el compromiso de velar por la Madre Tierra.