23 años de docente en las aulas de URACCAN

Por: Neylin Calderón

Ser docente ha sido una de sus mejores decisiones en la vida, dijo el profesor Alejandro Torres Raudales, quien el pasado martes 11 de febrero, recibió de manos del Presidente de la República Daniel Ortega, la Orden de la Independencia Cultural Rubén Darío, reconocimiento otorgado a los mejores docentes del país.

Alejandro de Jesús de la Buena Esperanza Eugenio Torres Raudales, ahora conocido como el profesor Alejandro Torres, nació el 25 de diciembre de 1946, en San Carlos, Río Coco, municipio de Waspam, es mestizo con descendencia mayagna, por parte de familiares maternos, sus padres fueron, Florencia Raudales Cardenales y Modesto Torres Silva.

Trayectoria en la docencia

Torres inició con la labor de docencia en el año 1977, “empecé como maestro empírico, sin embargo, no puedo obviar que yo ya había obtenido 8 años de servicio haciendo mis labores de logística en la oficina de la delegación municipal de Waspam, en ese tiempo que comencé, las oficinas eran un proyecto piloto de Educación Fundamentada, que era un programa que estaba dirigido para enseñar en español a los niños desde Cabo Gracias a Dios hasta Santa Isabel”, contó.

Asimismo, recordó que cuando empezó con esas labores, tenía apenas 11 años de edad, “aparezco con 58 años de servicio porque gané un año más al participar como técnico durante la Cruzada Nacional de Alfabetización en 1980 bajo la zona, número 2 que incluyen las escuelas que van desde Laguna Tara rio arriba hasta Raiti”, relató.

En esta ardua labor, el profesor Torres tiene 59 años de trabajarle al Ministerio de Educación y 23 años de trabajarle a la Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe nicaragüense, (URACCAN), en su Recinto Bilwi.

Este destacado profesor de generaciones, también 9 años y medio con INATEC, 5 años con el Colegio Niño Jesús, 5 años con el Colegio Juan Amos Comenius Jack, “sin contar otras obras extras que me pidieron otros colegios como el Adventista Porteño y el Verbo, en algún momento dado tuve la suerte que el área que estaba manejando y que estaba tratando de agarrar habilidad era matemáticas”, comentó.

Sobre su proceso de educación

Después de estar cinco meses dando clases de educación primaria en la Iglesia Morava, porque no había instalaciones de una escuela en la comunidad de Ulwas, Río Coco “me mandaron a la Escuela de Leymus, Río Coco, donde fui como responsable, estando así, el 10 de junio de 1967 el profesor Ramón Libon, que era el director del proyecto piloto de aquel entonces, me mandó a llamar para informarme de que yo iba a seguir mis estudios en la Escuela Normal Franklin Delano Rusbell de Jinotepe, Carazo”, memoró Torres.

Fue así que se graduó de Educación Secundaria y de Profesor de Educación Primaria en el año 1969 “para ese tiempo fue una graduación mixta que fue casualmente un 08 de diciembre de 1969”, además Torres contó que aún mantienen viva la amistad con sus excompañeros que hace 50 años se graduaron como bachilleres en Jinotepe, Carazo.

Al salir de la Escuela Normal, el profesor Alejandro mantuvo la idea de seguir con su preparación universitaria, “claro, como yo estaba en Río Coco, era apenas el tercer o cuarto maestro graduado, me empezaron aprovechar para diferentes funciones en la delegación, como director, inspector auxiliar (encargado de capacitar y asesorar a los demás docentes y directores)”, especificó.

De acuerdo al maestro en 1976 desarrollaron el curso de profesionalización, organizados por la UNAN-Managua en Puerto Cabezas, “solo me despedí de mi familia en Río Coco y me vine a estudiar a Bilwi, el último curso que ofreció esta universidad fue el que se realizó en 1979, eso me permitió haber logrado aprobar 63 créditos”, narró Torres.

Desde ese instante pensó en la posibilidad de dar clases de secundaria, porque el curso era para ser Maestros de Educación Media, aunque no lo haya terminado en su totalidad.

En 1979, lo nombraron como profesor de matemáticas, en el Instituto 11 de Septiembre, con el proceso de la revolución el proyecto de ese colegio se detuvo, pero, “el 10 de agosto recibí una carta de parte del responsable departamental desde Bluefields donde decidí que si podía apoyarlos con el trabajo educativo ahí, le solicitamos que atienda la zona número 2 que va desde Lagun Tara hasta Rayti nuevamente”, manifestó Torres.

“En 1986 a través de las reuniones sostenidas por el MINED y ANDEN, como nosotros participábamos en esas reuniones, planteamos en una reunión donde estuvo la doctora Mirna Cunningham, en ese entonces Responsable del Gobierno Regional, que ya habíamos un grupo de profesores que habíamos conseguido ciertos créditos en la universidad de la UNAN, que nos diera una oportunidad, entonces, ellos nos consiguieron presupuestos con NORAD, y pudimos sacar maestro de Educación Media, a eso se le llamó Promedia 1, terminando eso, salí como maestro de Educación Media en Ciencias de la Educación con mención en Matemáticas,  después de varios cursos salí como Licenciado en Ciencias de la Educación con mención en Matemáticas en la URACCAN”, puntualizó Torres.

Sus pasos como docente de la URACCAN

El maestro Torres inició a ser docente de la Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaragüense (URACCAN), en el recinto Bilwi desde el 20 de enero de 1997 como maestro horario, y al empezar el segundo semestre lo nombraron como maestro de tiempo completo para la especialidad de matemáticas.

“Mi experiencia como docente ha sido bella, linda, porque pude ir viendo como aprendían los jóvenes, que métodos están aplicando y a medida que estamos investigando de acuerdo con los cambios curriculares que se estaban dando en el Ministerio de Educación y también en las universidades, eso me permitió irme ampliando y actualizando, de tal forma que ya cuando me jubilo en el 2018, ya mis clases las daba en la plataforma virtual”, menció Torres.

Condecoraciones recibidas por sus labores de docencia

El maestro Alejandro Torres con su vasta experiencia laboral ha conseguido reconocimientos por su buen trabajo y desempeño como docente, entre las más recordadas por el profesor están las recibidas en el año 1986, “me dieron la medalla de un trabajador ejemplar, en el 2002 me dieron la Orden Doris Robb Gabay por parte de la URACCAN, en el 2010 Mi Familia (Ministerio de la Familia), me dio el estímulo de un trabajador ejemplar, me quisieron decir en otras palabras que era una reliquia ejemplar”, recordó.

En este contexto, Torres, comentó que la URACCAN le hizo un homenaje especial en septiembre del 2016, “dieron un reconocimiento, un diploma donde reconocían mi labor como docente, luego el 01 de octubre del 2016 recibí por parte del Presidente de la República <La medalla Presidente> como maestro emérito y ahora pues, el 11 de febrero del 2020 también el presidente de la República me dio la Orden de la Independencia Cultural Rubén Darío”, expresó.

Su familia un pilar fundamental en su caminar diario

Alejandro Torres Raudales, casado con la señora Mery Law Thomas Muller, quienes procrearon a seis hijos, la mayor es Tessia Olga, Alejandro Estanislao, Tesio Otulio, Alexa Florencia, Tewin Fernando y Dalieska, todos han sido formados profesionalmente, unos con grandes cargos en las instituciones del estado y otros como docentes de la universidad.

No cabe duda, que el ejemplo de perseverancia y disciplina por parte del maestro Alejandro Torres, logra un legado importante para los pueblos caribeños, sobre todo para las generaciones estudiantiles, tanto en la educación primaria, secundaria y universidad quienes tuvieron la oportunidad de recibir las enseñanzas y conocimientos por parte del profesor.

Torres dijo: “la experiencia en URACCAN ha sido excelente, porque aprendí las nuevas metodologías y las orientaciones universitarias, eso significa que recibí una serie de capacitaciones por parte de la universidad, sobre interculturalidad y sobre el uso de la plataforma virtual”, concluyó el docente.